Querido diario:
Hoy me he dado cuenta de una cosa. Bueno, en realidad no, porque ya me había dado cuenta antes pero, hoy más que nunca, creo que me la han vuelto a jugar.
Ya sabía que era ingenua en sí, pero no me había dado cuenta de lo tanto.
Y sigo sintiendo el mismo dolor que me produce sentirme engañada como la primera vez. A veces pienso que nunca aprendo la lección.
No sé si esto es bueno, porque cuando intento no ser tan ingenua lo único que hago es empeorarlo, después de todo empiezo a volverme paranoica, a pensar si todos me están engañando, y no confio en nadie.
Empiezo a caer en trampas que yo misma me hago. Ya no sé en que pensar. Ya no sé si vale la pena pensar que en este mundo hay alguien de fiar...
No hay comentarios:
Publicar un comentario